¿Qué tiene de especial este año? Para ser sincera ni recuerdo, vivi muchas cosas, soy tan distinta al año pasado, soy otra...
Cada día me renuevo guiandome de un pasado que intento entender para olvidar y dejarlo finalmente donde debería estar, muy atrás…
Citando algunos momentos resaltantes del 2008 primero que nada puedo decir generalizadamente que las lecciones no fueron ni faciles ni dificiles, simplemente fueron, en ese momento y lugar, para recordarme pensamientos y sentimientos que dejé fragmentarse hasta desaparecerlos, quizás por miedo a seguir su rumbo, quizás ocultandome de mi misma para no llegar a sentir lo que a la final me estallaría cual bomba de tiempo, curiosamente así ocurrió cada acontecimiento, siguiendo ese patrón de significado que hace ver la simplicidad de la vida pero que no lo vemos ni aunque esté plantado en nuestras propias narices, o peor aún, no nos provoca verlo porque pensamos que es el camino más dificil, el del temor y la duda.
Ya renací y me siento agradecida, tan sólo me falta aprender a usar mis nuevas alas para así poder obtener los verdaderos frutos de esos vuelos , pero eso se lo dejo a la naturaleza
Deseo que nos olvidemos, aunque sea en esa tarde de domingo que no tenemos nada por hacer más que revisar el periódico dominical cargado de esos sentimientos cultivados quimicamente por los seres humanos para intoxicar todo el entorno y evolución, de los politicos resolviendo problemas creados en nuestras propias mentes, de seguir la rutina vacía por miedo a algo nuevo, de regalar una sonrisa desgastada por lastima y caminar saludando al conocido como un acto de mera formalidad negandole el brillo real de esa sonrisa reluciente que busca con ansias para tener la excusa de ser feliz, olvidemonos de toda esa mecanicidad estúpida e ilógica que nos aleja de nuestra naturaleza real y detengamonos a “Ser”, porque esa será la única manera de crecer y reencontrarnos.
Para el 2009 deseo un libre albedrío conciente y puro, no egoísta y atrapado sólo en nuestra plenitud interior y sobre todo exterior, deseo un mundo menos ficticio, con elementos realmente renovables e infinitos, no de aquellos que se agotan luego de una probada.
Violeta Sánchez*-
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